
Para muchos, la Segunda Fase de esta Liga Nacional iba a significar un borrón y cuenta nueva para el Centro Juventud Sionista. Sin embargo, el equipo volvió a jugar mal, desnudó sus falencias y cayó derrotado, sin atenuantes, por 89 a 82 ante Monte Hermoso Básquet.
Los 82 puntos anotados por Sionista no están para nada mal, es cierto. Pero mostró una endeblez defensiva alarmante y un casi nulo juego en equipo. Así, serán más los partidos que pierda que los que gane.
En el primer tiempo, Sioni la sacó barata: terminó nueve puntos abajo (49 a 40) pero en un desarrollo que lo mostró completamente superado por la visita, un Byron Johnson inspirado (15 puntos y 7 rebotes) y un Alberth White certero (13 unidades). Por el lado de Sionista, Alejandro Zilli sumaba 10.
Las cosas cambiaron un poco en el inicio del tercer cuarto, cuando el Centro logró ponerse a 5 puntos. Pero cada vez que el local lograba acercarse, Monte Hermoso aniquilaba su ilusión a triples (cuatro en el chico). Así, los de Mauricio Santangelo lograron sacar la máxima del juego (70 a 55).
A base de buenas defensas en los últimos minutos del tercer cuarto y en el amanecer del chico final, Sionista metió un parcial de 16 a 3 y limó la diferencia a dos (71 a 73) pero un par de desconcentraciones y rebotes ofensivos (a Sioni le tomaron 5 consecutivos) hicieron que la visita se aleje y que termine por lapidar las ilusiones de los nuestros.
El máximo anotador de Sionista fue Alejandro Zilli, con 16. Bien lo de Lisandro Rasio (12), entrando desde el banco y aportando minutos de jerarquía en una posición, la de ala-pivote, que conoce bien. En Monte Hermoso se destacó Byron Johnson (23 puntos, 9 rebotes, 3 asistencias y 3 tapas), Alberth White (19 unidades y 9 rebotes) y Hernando Salles, enorme base que solamente marró un tiro de los siete que tomó y finalizó con 18 unidades y 7 asistencias.
¿Cómo se sale de este mal momento? Trabajando y creyendo en la filosofía de juego del entrenador. Será complicado, pero, a mi entender, deberán levantar en su nivel los bases y repatrir más balones. Nada es imposible y Sionista todavía tiene tiempo.