jueves, 6 de mayo de 2010

No se juegan, se ganan


Como se suele decir en la lengua del hincha: hay partidos que no se juegan, se ganan. El de ayer fue un ejemplo ideal para mostrar esa máxima. Sionista se impuso por 82 a 81 ante Atenas de Córdoba y puso una caliente serie 2-1 a su favor y puede definir el viernes en Paraná.

¿Mereció ganarlo Sionista? Si es por el marcador final, sí. Si es por el desarrollo entero del juego, no. Si es por actitud, garra y huevo, sí. Si es por ganas de vencer, también. Si es por cambio de mentalidad, por supuesto. Es que Atenas dominó con mucha jerarquía durante 35 minutos del encuentro, llegó a sacar 18 puntos (53 a 35) y jugaba mejor que Sionista. Pero el Centro cambió su chip y se pudo llevar un juego que estaba muy complicado.

Atenas salió con la iniciativa en el primer cuarto, con Juan Manuel Locatelli (gran ausente en los dos juegos en Córdoba) con 5 puntos y con Diego Lo Grippo (6) en el poste bajo. Se dio un buen duelo de bases entre Juampi Figueroa y Luís Cequeira, pero con Junior lastimando más en ataque. Con un doble sobre la chicharra de Chuckie "La Garantía" Robinson, Sioni se iba perdiendo por 1 (20 a 21).

A partir de ese momento, el Centro perdió la brújula y estuvo muy impreciso en ataque. La visita, siempre con Lo Grippo y otro ladero -que en este caso fue el interminable Diego Osella- se fue a 11 puntos (33 a 22) a falta de 6:56. Sebastián Svetliza movió el banco y encontró en Cabrito Hure (5 puntos) y Jimmy Boston (6 unidades) algo de aire para ponerse 33 a 38, pero Atenas cerró muchísimo mejor las acciones y ganaba por 49 a 35.

La sensación en el estadio era que Sioni podía revertir las cosas, pero si hacía un cambio de 180º en su actitud y juego. Pero el tercer cuarto arrancó como terminaron los dos anteriores: con el Griego dominante y Lo Grippo intratable. Para el colmo Alejandro Zilli llegaba a la cuarta falta con dos consecutivas (una de ellas en ataque) y Atenas metió un parcial de 4-0 y se fue a 49 a 35. Sionista no jugaba bien, aunque por lo menos cambió su actitud y se notó. Cuando pasó el temblor, juntó los escombros y volvió a armar su casita de nuevo. Con 7 puntos de Fioretti, 6 de Martínez y 8 de Robinson; ganó el cuarto 21-16 y afrontaba los últimos diez abajo por 65 a 56.

Si algo tenía que suceder para que Sioni se ponga en partido era conseguir una determinada cantidad de puntos rápidamente para acercarse en el marcador y despertar a su gente. Y lo logró cuando metió un parcial de 7-0 y se puso 63 a 65. Luego llegaron 2 triples puntualísimos de Gary Buchanan y Sionista pasó, por primera vez, al frente por 69 a 67. En ese momento, uno suponía que el juego se iba a tranquilizar por parte del local. Sin embargo, entró en una vorágine en donde se jugó poco, se defendió mucho y se permitió todo. Las pocas faltas cobradas, eran a favor de Atenas y los cordobeses terminaron con un impecable 27/30 en libres. Sionista defendió muy bien una ofensiva griega clave: cuando quedaban 54 segundos agotó los 24 y perdía por 2 (81 a 79) con la posesión del balón. Chuckie Robinson empató las cosas en 81 y luego Juan Cantero, quizá por el vértigo mismo del juego, se apuró e intentó un triple, que marró. Martínez fue a la línea y encestó 1/2 (82 a 81).

Párrafo aparte para el final del encuentro. La terna Fernández-Mendoza-Rodrigo demostró lo mal que se puede dirigir un encuentro y, en la última bola para Atenas, Locatelli recibió no menos de tres faltas en su camino hacia el aro. Eso, posibilitó que el Griego no tenga la chance de ganar el partido.

No le echemos la culpa a los árbitros, porque verdaderamente cumplieron una actuación para el olvido pero para los dos lados. Y Sionista lo ganó porque tiene mucho coraje y actitud.

El máximo anotador del Centro fue Chuckie Robinson con 20 tantos y 11 rebotes. Bien lo de Junior Cequeria con 14 y 4 asistencias y Mati Fioretti con 13 puntos, 4 asistencias, 3 rebotes y 2 robos. Párrafo aparte para Buchanan, el artificie ofensivo de la levantada, que anotó sus 9 de sus 12 unidades (3 triples) en el último cuarto.

Ganó Sionista señores. Lo ganó porque tiene actitud y sabe a lo que juega. Lo ganó porque se despertó a tiempo. Puso la serie match point y podrá definir el viernes de local para jugar su primera final en la historia. Porque como reza el refrán del hincha, las (semi)finales no se juegan, se ganan; y Atenas la jugó, pero Sioni la ganó.

1 comentario:

TANO MARINGOLO dijo...

Me pone muy contento la performance de Sioni, no te mando un texto por cábala, ya que luego del primer triunfo no lo hice.
Yo desde BS AS estoy copando la parada, ya tuve una agarrada al aire con Diego, pero me la banco.
Aguante Sioni.