Un triunfo a la ilusión

Ya no quedan palabras para describir a este equipo. Es, junto con Peñarol, el que mejor juega. Pero va más allá de eso. Dio clarísimas muestras de personalidad. Y ayer fue una de esas tantas batallas que terminó ganando con el corazón. Esos partidos que a uno lo hace sentirse orgulloso de ser hincha de Sionista. La serie estaba 2-1 para los nuestros. Si perdían, había un quinto y áspero juego en Paraná. Pero se ganó por 83 a 75, dando clarísimas muestras de lo superior que fue durante toda la serie.

El primer tiempo tuvo un resultado cambiante, porque el período inicial lo ganó Sioni 22 a 15 y el segundo fue para Quimsa por 22 a 16 (38 a 37 para Sioni al llegar el descanso largo). Ambos equipos dependieron mucho de su juego interior. El Centro con Ale Zilli y Chuckie "La Garantía" Robinson y La Fusión, como era previsible, con Román González y Dionisio Gómez Camago.

Los segundos veinte fueron otra cosa. Habrá sido la charla de Svetliza, el convencimiento de los jugadores o las ganas de ganar, pero Sioni salió diferente, con ganas de arrollar a su rival. Quizá no se notó tanto en el tercer cuarto si hablamos de puntos (21 a 18 para los nuestros) porque Quimsa no se iba a dejar perder tan facilmente, pero sí se vislumbró en el último cuarto en el tema de manejos de la pelota. Sioni no se equivocó y supo a qué apostar: al poste bajo y a la defensa. Además, y jamás me cansaré de decirlo, mostró una personalidad tremenda para robar ese juego en Santiago, sellar la serie y avanzar a las semis por segundo año consecutivo.

El máximo anotador fue Chuckie Robinson, que hizo 22 puntos y bajó 7 rebotes y Ale Zilli que anotó 18 y bajó 12 rebotes. Muy bien lo de Javier Martínez con 9 puntos 9 asistencias, Cequeira (10 y 3 asistencias) y Buchanan (13 y 3 asistencias).

Sioni robó el cuarto y ahora lo espera Atenas o Regatas, cualquiera de los dos quipos son durísimos. Igualmente este equipo tiene personalidad y supera cualquier obstáculo. Jugando como se lo está haciendo, el Centro es un gran candidato. Pero siempre hay que ir paso a paso.

foto: Pasión y Deporte/